Uno de los trabajos más delicados que enfrenta el tornero aficionado, consiste en el torneado de un cigüeñal de dos muñequillas de una sola pieza como el mostrado en la fotografía, entiéndase que el volante es una pieza atornillada fabricada aparte.
Una alternativa a este mecanizado es la de construir el mismo cigüeñal a base de piezas acopladas mediante pasadores elásticos, ambos se muestran en las imágenes